Equipamiento para almacén: todo lo necesario para mejorar tu logística

Cualquier instalación logística precisa de un equipamiento para almacén para llevar a cabo su actividad diaria de forma eficiente. Si entendemos el equipamiento como cualquier elemento que posibilita la actividad de un almacén (racks, montacargas, sistemas automatizados…), el mercado ofrece una gran variedad de soluciones que se ajustan a las particularidades de cada compañía. Por ejemplo, según el tipo de unidad de carga y producto que se gestione, el flujo de materiales u otros condicionantes influyen en la elección del equipamiento más adecuado para cada necesidad. 

En este artículo hacemos un repaso de todos los equipamientos que pueden ser necesarios en un almacén. Desde los más elementales y evidentes hasta otros más sofisticados que, si bien no son tan conocidos, pueden suponer igualmente un importante aumento de la productividad y seguridad del almacén.

¿Qué es el equipamiento de almacén?

El equipamiento de almacén hace referencia a cualquier elemento, sistema o máquina utilizado en tareas logísticas como: recepción de productos, almacenamiento, gestión de stock, transporte, preparación de pedidos y expedición de mercancías. Se puede diferenciar entre equipamiento manual (racks selectivos, montacargas o máquinas para preparar pedidos, por citar algunas) y automático (como transportadores, electrovías o transelevadores).

Cada proceso operativo requiere de un equipamiento de almacén específico si se busca alcanzar la máxima eficiencia logística. Por ejemplo, efectuar la carga y descarga de camiones o preparar pedidos de artículos de pequeñas dimensiones demandan soluciones diferentes. Por ese motivo, acertar en la elección del tipo de equipamiento de almacén para cada operativa es clave a la hora de determinar el éxito en la cadena de suministro de una empresa.

Equipamiento y soluciones de almacenamiento

El equipamiento relacionado con el almacenamiento de mercancía es muy variado. Por un lado, existen los sistemas de almacenamiento destinados a productos de pequeñas dimensiones, como pueden ser los racks picking o los racks carton flow.

Por el otro, se encuentran los sistemas de almacenamiento para tarimas destinados a productos más voluminosos, como los racks selectivos, los racks drive-in, racks móviles, racks Push-back y racks dinámicos. Entre los sistemas por compactación destaca el Pallet Shuttle semiautomático, una solución de almacenamiento que utiliza un carro motorizado para mover tarimas por el interior de racks de alta densidad. 

Además de cajas y tarimas, puede emplearse equipamiento para el almacenamiento de mercancía voluminosa. Ese es el caso de los racks cantilever, concebidos para cargas largas gracias a su configuración de brazos en voladizo. 

Existen también soluciones de almacenamiento especializados en el almacenamiento de productos de mercancía irregular como las estanterías para bobinas.

Equipamiento digital: el WMS

Cada vez es más usual implementar un sistema de gestión de almacenes (WMS) que coordine todas las operativas del almacén, desde la preparación de pedidos hasta la gestión de la ubicación de cada referencia, entre otras. El WMS dirige las operaciones en la instalación: a través de un terminal de radiofrecuencia, el software indica al operario qué tarea realizar, minimizando el riesgo de error en cualquier fase logística.

El software también está presente en las distintas estaciones de trabajo ─habitualmente accesible desde un PC─. Asimismo, genera e imprime las etiquetas de cada producto para facilitar su identificación y trazabilidad.

Montacargas y equipamiento para transporte de tarimas

En un almacén manual, el flujo de mercancías se lleva a cabo con montacargas y otros equipos de manejo manuales. Estas máquinas se encargan de transportar la mercancía paletizada entre diferentes áreas de almacenamiento. 

No todos los montacargas sirven para cualquier función. Por ejemplo, los patines hidráulicos y los apiladores son más corrientes en la preparación de pedidos o en los movimientos de pocas tarimas entre ubicaciones cercanas. Por su parte, los montacargas retráctiles o contrabalanceados se emplean para desplazar tarimas y ubicarlas en los distintos bloques de racks y a diferente altura. 

Equipamiento para la preparación de pedidos y el ‘packing’

Los preparadores de pedidos se sirven del equipamiento de almacén para reducir los desplazamientos y ser más eficientes durante el picking. Una de las soluciones más comunes son las máquinas recogepedidos, un equipo de manejo manual que agiliza el picking sobre tarimas. Para la preparación de pedidos con cajas, es frecuente que el operario se desplace con un carro de picking donde coloca los productos de múltiples pedidos. 

En esta fase logística, los operarios cuentan con dispositivos de asistencia al picking que disminuyen el margen de error. Un ejemplo es el picking por voz, en el que los operarios emplean un micrófono y audífonos para interactuar con el software de gestión y seguir sus indicaciones a la hora de completar cada pedido.

Por otra parte, las estaciones de trabajo habilitadas para el packing se componen de equipamientos como básculas, máquinas especializadas en el empaque y de un banco de trabajo ajustable y ergonómico. De igual modo, es posible si así se requiere conectar la estación de trabajo al WMS mediante una computadora.

Equipamiento para almacenes automatizados

Una de las soluciones más socorridas para agilizar el tránsito de mercancía en el almacén y elevar el rendimiento es automatizar parte o la totalidad de las operativas de almacenamiento. El almacén puede equiparse con un equipo de manutención automático, como por ejemplo transelevadores para tarimas. Existen múltiples tipos de transelevadores ─trilateral, monocolumna o bicolumna, entre otros─ que se adecuan a los requerimientos de cada cliente. Estos tipos de robots permiten compactar la mercancía y disparar la productividad gracias a su agilidad en los ciclos de trabajo combinados. 

En el caso de mercancía almacenada en cajas o bandejas, puede implementarse el sistema miniload, una máquina robotizada que acelera la ubicación y extracción del stock de los racks. 

El almacenamiento de la mercancía no es la única operativa que puede automatizarse: también pueden instalarse sistemas de transporte automatizados ─como transportadores para tarimas o para cajas─ que incrementan el flujo de movimientos de mercancía en el almacén. Esta categoría comprende las electrovías para tarimas, un sistema de transporte automatizado formado por carros autopropulsados que se mueven por un raíl electrificado creando un circuito cerrado. 

En el mercado, también están presentes otros sistemas de transporte robotizado como los vehículos de guiado automático o los robots móviles autónomos (AMR), que emplean tecnologías como el machine learning para transportar la mercancía por el almacén.

Equipamiento de seguridad para almacenes

Los almacenes han de contar con sistemas de seguridad que garanticen la integridad de los operarios, la mercancía y los equipamientos de transporte y almacenamiento. En este escenario cabe destacar el equipamiento relativo a  la señalización en el almacén para prevenir los principales riesgos en almacenes: desde señalización del suelo, hasta paneles luminosos, pasando por la placa de características para racks.

Para garantizar la seguridad, también es imprescindible dotar a los operarios de equipos de protección individual (EPI) de acuerdo con la legislación de cada país. Además, cuando sea indispensable, se han de instalar cerramientos de seguridad, protectores de racks o barreras peatonales.

¿Qué equipamiento se necesita para un almacén?

En el mercado existe una amplia gama de equipamiento de almacén para cada compañía. Factores como el espacio de almacenamiento disponible, las condiciones de almacenamiento o la unidad de carga con la que se opera determinan el tipo de equipamiento necesario. 

Cada tipo de rack, de montacargas o de dispositivo automatizado cumple una función logística específica. La suma de todos los equipamientos otorga productividad y eficiencia a un almacén. 
 
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