NFT en logística: ¿cómo sería su aplicación?

El NFT es una tecnología relacionada con el blockchain que tiene un gran potencial en logística, ya que podría aportar un control mucho más preciso de la trazabilidad. Los NFT son documentos digitales que permiten identificar de forma única productos con propietarios, además de incluir ciertos detalles adicionales. Esta información no puede ser manipulada, algo que refuerza la confianza de los distintos participantes que intervienen en la cadena de suministro.

Con esta tecnología se dispone de un historial completo de las distintas fases que han superado los productos, una información fundamental en empresas de sectores como la alimentación.

Pero, ¿qué son exactamente los NFT? ¿Cómo pueden ser utilizados para mejorar la cadena de suministro? Os lo contamos en este post. 

¿Qué son los NFT?

Un NFT, por las siglas en inglés de Non Fungible Token (bien no intercambiable), es un documento digital asimilable a un "contrato" que queda registrado gracias a la tecnología blockchain. De ese modo, el NFT goza de los beneficios de la cadena de bloques, ya que es de visibilidad pública, los cambios que se hagan quedan guardados y no es modificable por un tercero. Según el NFT Yearly Report, elaborado por NonFungible.com con la colaboración de L'Atelier BNP Paribas, el mercado global de los NFT triplicó su crecimiento en 2020, alcanzando un valor total de más de 250 millones de dólares. 

Lo que hace realmente especial al NFT es el hecho de ser non fungible. Esto significa que es irremplazable, al contrario que, por ejemplo, un bitcoin o el dinero corriente. No hay dos NFT iguales, en comparación a una moneda, que puede ser sustituida por otra sin que ello afecte a su valor. Los NFT, a diferencia de las criptomonedas, no se han creado para ser utilizados como forma de pago, sino para certificar quién es el propietario de ciertos bienes, que en los primeros usos han sido mayoritariamente digitales. Esto queda anotado en el blockchain (que en el caso de los NFT, esta red está desarrollada por la empresa Ethereum), lo que asegura que estos contratos sean inmutables y públicos (todo el mundo sabe quién posee qué).

Cualquiera que lo desee puede tener acceso a los datos cifrados del NFT, ya que la red no está centralizada, pero únicamente el propietario de ese NFT puede destruirlo o transferir la titularidad a otra persona. Un NFT puede identificar de forma única desde una fotografía a una obra de arte, pasando, incluso, por un simple tuit. Sin ir más lejos, el fundador de Twitter, Jack Dorsey, vendió como NFT el primer tuit de la historia por un total de 2,9 millones de dólares.

Usos de los NFT en la cadena de suministro

El NFT es una tecnología en fase experimental y aún se están explorando sus aplicaciones concretas en la industria. Sin embargo, ya han empezado a aparecer algunas soluciones de NFT destinadas a la logística y la cadena de suministro. Una importante aportación de esta tecnología a la supply chain tiene que ver con la trazabilidad y el rastreo de un producto determinado.

Gracias a los NFT podríamos conocer los metadatos de ciertos productos, como por ejemplo, su responsable actual, en qué lugar se encuentra y ciertas características como el peso, tamaño o certificaciones. Esta información se va actualizando en el NFT, que queda almacenado en la red de blockchain, a medida que el producto avanza por la cadena de suministro. Cuando la mercancía llega a su destino, puede accederse a un historial detallado y fiable de todo el recorrido por el que ha pasado el producto, desde su origen hasta el momento en que ha sido entregado.

Podríamos resumir las ventajas que los NFT aportarían a la logística de la siguiente manera:

• Seguridad. El traspaso de información entre los diferentes agentes que participan en la cadena de suministro es altamente seguro. Los datos de un NFT se almacenan en la red de blockchain mediante un contrato inteligente (smart contract), haciendo que la información introducida no se pueda destruir, eliminar o replicar sin autorización. Todo queda registrado en cada uno de los nodos que conforman la red.
• Trazabilidad. Cuando se trabaja con alimentos, productos farmacéuticos y/o químicos, así como productos perecederos, es importante saber por qué procesos logísticos y de fabricación han pasado, dónde han estado y durante cuánto tiempo. Con la tecnología de los NFT la transparencia es total, por lo que cualquiera dispondrá de una completa trazabilidad del producto en tiempo real.
• Responsabilidad. ¿Quién es el responsable de la mercancía en las distintas etapas de la cadena de suministro? Gracias a los NFT podremos saber quién está a cargo de un bien en cada momento. Además, para poder enviar un NFT ambas partes deben llegar a un acuerdo de responsabilidad. Es decir, no se puede enviar un NFT si la contraparte no está de acuerdo en recibirlo, del mismo modo que no entregarán los bienes si el responsable no ha recibido los NFT. 

En líneas generales, la principal ventaja que aporta la tecnología NFT en la logística tiene que ver con la seguridad, la agilidad y la transparencia a la hora de consultar y traspasar toda la información relacionada con un producto determinado.

Mayor seguridad y trazabilidad

El NFT es, a día de hoy, una tecnología joven y con un elevado margen de crecimiento. Al igual que ocurrió con el bitcoin, una de las criptomonedas más utilizadas, el NFT ha penetrado en la era de la transformación digital con fuerza y el interés es creciente. Pero todavía habrá que esperar un tiempo para ver si finalmente los tokens NFT se integran con normalidad en el mundo físico de la logística. 

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